Se le ha dado no sólo el privilegio de confiar en Cristo, sino también el privilegio de sufrir por Él (Fil. 1:29).
El pronunciamiento de Pablo en las Escrituras de hoy es una revelación distintiva. Se
añade a esto, "Podemos regocijarnos, también, cuando nos encontramos
con problemas y ensayos, ya que sabemos que nos ayudan a desarrollar la
resistencia. Y la resistencia se desarrolla la fuerza de carácter, y el
carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación. Y esta
esperanza lo hará no conducir a la decepción Porque sabemos lo caro que Dios nos ama "(Rom. 5: 3-5).. Debido a que no hay desarrollo del carácter y sin sufrimiento, el
sufrimiento es necesario para nuestro crecimiento espiritual hacia la
madurez.
Dios no sólo quiere que vayamos al cielo, Él también quiere que las personas con carácter de servirle aquí en la tierra. Esto es imposible sin sufrimiento y las pruebas (ver Heb. 12: 5-11). Dolor, sufrimiento, y los ensayos son experimentados por el creyente, no para castigarnos, sino para fortalecer nuestra fe. Nos enseña cosas nuevas acerca de Dios todo el tiempo y nos permite vivir más cerca de él. El sufrimiento de Cristo fortalece su experiencia humana y la perfeccionó. Si nos negamos a sufrir y rechazamos la cruz, no vamos a ser de mucho valor para Dios.
Hay consuelo en el dolor, el juicio, y la tristeza. Dios nos da muchas bendiciones en nuestro sufrimiento. Nada de lo que Dios permite en la vida de su niño pasa por error. Siempre hay una, la razón santo más alto para la misma. Nuestra fe no se puede construir que no sea a través del dolor y el sufrimiento.
Santo Padre, estoy seguro de su amor, porque confía en mí con mi parte del sufrimiento. Amén.
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